Creado por la Nasa, perfeccionado en Celluma por BioPhotas
A fines del siglo pasado, científicos y médicos de investigación, junto con el Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA, comenzaron a investigar el impacto de la microgravedad y la hipergravedad en el crecimiento de las células humanas y vegetales. Preocupados por los astronautas que podrían lesionarse o enfermarse en un vuelo espacial a largo plazo, los estudios de la NASA concluyeron que la gravedad es necesaria para el crecimiento celular normal, señalando que «las heridas se curan con menos eficacia en el espacio que en la Tierra».
En respuesta a este importante riesgo para la salud, la NASA desarrolló una tecnología de LED que se mostró muy prometedora para suministrar luz a las profundidades de los tejidos del cuerpo para promover la cicatrización de heridas y el crecimiento del tejido humano. «El dispositivo LED de la NASA estimula el proceso de energía básica en las mitocondrias (compartimentos productores de energía) de cada célula, particularmente cuando se usa luz del infrarrojo cercano para activar sustancias químicas sensibles al color (cromosferas, sistemas de citocromos) dentro de la célula». La NASA también informó que la síntesis de ADN en fibroblastos y células musculares se cuadruplicó cuando se expuso a la luz LED. Con base en estos hallazgos, la NASA observó que este tipo de curación mejorada de heridas también podría beneficiar la atención médica civil, situaciones militares y vuelos espaciales a largo plazo.
Dicha tecnología ha sido científicamente probada a través de los diferentes ensayos clínicos, para regular la función celular en el tratamiento de muchas afecciones comunes, restaurando la capacidad natural del cuerpo para curarse a sí mismo. A diferencia de muchas terapias ampliamente aceptadas en las que el tejido vital se daña intencionalmente para provocar una respuesta curativa, el uso de luz LED para reactivar la función celular de una manera no invasiva permite que el cuerpo recupere la vitalidad de forma natural.
«El LED reacciona con los citocromos en el cuerpo», explica el Dr. Harry Whelan, profesor de neurología pediátrica y director de medicina hiperbárica en el Medical College of Wisconsin. “Los citocromos son las partes de las células que responden a la luz y al color. Cuando se activan los citocromos, sus niveles de energía aumentan y eso estimula el crecimiento y la regeneración de los tejidos ”1.
La terapia biofotónica de Celluma aplica una combinación de energía de luz LED y tecnologías de fotomodulación patentadas para tratar de manera alternativa o complementaria: el acné, la estética, la inflamación y las afecciones de dolor muscular.
Referencia:
1. Eells J, Wong-Riley M, VerHoeve J, et al. Transducción de señales mitocondriales en la cicatrización acelerada de heridas y retina mediante terapia con luz infrarroja cercana. Mitocondria . 2004; 4: 559-567.